Para que tu vida cambie y sea cada vez más hermosa debes acercarte al Corán, inicia tu día con él y dedica una parte de tu tiempo a leerlo. El Corán se deposita directamente en el corazón, es como una lámpara que además de iluminar tu camino, le da calidez a tu corazón, es una lámpara que no se apaga con la brisa ni el viento. El Corán extingue la oscuridad del alma y ahuyenta las preocupaciones y el miedo se desvanece como la sal en el agua. Cuando tienes una cita con el Corán muchas cosas cambian en ti. Deja esta vida mundanal de lado y esfuérzate en el Corán, ahí está la felicidad, ahí está la verdad.