Las palabras son como la ropa, debes probarlas primero en ti antes de salir con ellas antes de mostrarlas a los demás, ya que en ocasiones los gustos de las personas y los modales no concuerdan o no combinan. A los corazones de las personas se llega con amabilidad y respeto. Qué bonita es la vida cuando las lenguas se controlan y se utilizan para pronunciar las mejores frases y mostrar los mejores modales. Trata a las personas como buenos modales y recuerda que un mal trato, es más doloroso que un golpe.