¿Recuerdas cuando tus amigos te llamaban por el único motivo de que salieras a jugar? ¿Recuerdas cuando tenías la habilidad de reírte por todo, hasta por las cosas sin sentido? ¿Recuerdas cuando llorabas cuando sentías miedo?, podías compartir tus cosas para que todos jugaran y fueran felices. ¿Qué conservas de esa etapa? ¿Sigues llamando a tus amigos sin que sea por un compromiso? ¿Sigues siendo tan carismático que te ríes por todo? ¿Te sientes feliz compartiendo tus cosas con los demás? ¿Lloras cuando sientes miedo? ¿Mantienes el niño que algún día fuiste?, si es así que bueno, si no lo es, viaja en el tiempo y toma a ese niño y ¡aprende todas esas cosas buenas e inocentes que solo un niño puede sentir! La edad es un número nada más.