Vitaminas para el alma - 186

Vitaminas para el alma - 186

Sino puedes secar las lágrimas de alguien al menos no se las causes.

Sino puedes ayudar a alguien al menos no lo hundas.

Sino puedes alimentar a alguien no lo hagas pasar hambre.

Sino puedes apoyar a alguien al menos no lo humilles.

Sino puedes ser bueno al menos no seas malo.

El verdadero creyente, ve la primera lagrima, limpia la segunda, e impide que salga la tercera en los rostros de sus hermanos. Por último, no basta con ser creyente, hay que parecer creyente,

y nadie será creyente hasta que no quiera para su hermano lo que quiere para sí mismo.