Señor nuestro, pon sobre los rostros de aquellos que queremos y tienen un buen corazón, alegría, aunque estén lejos de nuestros ojos, ya que la distancia no significa ausencia. Ninguna tristeza sobrevive al tiempo. Señor mío, haz que esas personas, sus padres y todo aquel que sea importante para él sean guiados y perdonados.